El término “emplearse a fondo”, cobra vida y nueva dimensión cuando vemos a los políticos en época electoral maniobrando para permanecer o llegar de nuevo al Poder. Su creatividad parece inagotable.
El último caso es un tal “padroncillo” propuesto por el actual Secretario de Interior y Policía y miembro prominente de su partido, actualmente en el Poder, que consiste en llevar votantes de su membresía política en grupo de 20 personas, utilizando para ello el Padrón Electoral que dicho partido mantiene y administra. El grito al cielo de los opositores no se hizo esperar. Acusaciones de marxistas, de trujillistas y de continuistas son los nuevos adjetivos que adornan a la gente del Gobierno. Dicen que dichos votantes no irían a las urnas de forma voluntaria, si no que estarían obedeciendo, no al miembro del partido, si no al Jefe de Seguridad del país.
No sabemos si los opositores actuarían de una forma diferente si ellos estuviesen en el Poder, aunque obviamente en este caso, existe un marcado conflicto de interés frente al delicado asunto de conciliar el tema de un personaje que viste el doble sombrero de hombre de Poder y de miembro del partido. Lo peor es que normalmente los subalternos tienden a escuchar sólo al del sombrero con mayor poder. Ojalá que no sea este un caso de
VOLUNTARIOS CON SOGA
Un partido opositor
que tocan y bota chispas
quiere mandar sus avispas
al Ministro de Interior.
No ha encendido su furor
una cuestión de bolsillo
se trata del padroncillo
nueva moda electoral
que dicen rememorar
mucho la Era de Trujillo.
No ve el Ministro aludido
su conflicto de interés
pues pertenece a la vez
al Gobierno y al partido.
Quizás no haya percibido
su marcada dualidad
de darle seguridad
al pueblo y toda su gente
o defender con sus dientes
su política entidad.
Quizá olvida el funcionario
aquel caso conocido
del jefe que hizo un pedido
de reclutar voluntarios.
Sólo un corto comentario
agregó el subordinado:
“Ahí le envío lo ordenado
en seco nadie se ahoga
y devuélvame la soga
con que los mando amarrados”.
Rafael Martínez Céspedes – Santo Domingo, R. D. 18 de enero de 2008
El último caso es un tal “padroncillo” propuesto por el actual Secretario de Interior y Policía y miembro prominente de su partido, actualmente en el Poder, que consiste en llevar votantes de su membresía política en grupo de 20 personas, utilizando para ello el Padrón Electoral que dicho partido mantiene y administra. El grito al cielo de los opositores no se hizo esperar. Acusaciones de marxistas, de trujillistas y de continuistas son los nuevos adjetivos que adornan a la gente del Gobierno. Dicen que dichos votantes no irían a las urnas de forma voluntaria, si no que estarían obedeciendo, no al miembro del partido, si no al Jefe de Seguridad del país.
No sabemos si los opositores actuarían de una forma diferente si ellos estuviesen en el Poder, aunque obviamente en este caso, existe un marcado conflicto de interés frente al delicado asunto de conciliar el tema de un personaje que viste el doble sombrero de hombre de Poder y de miembro del partido. Lo peor es que normalmente los subalternos tienden a escuchar sólo al del sombrero con mayor poder. Ojalá que no sea este un caso de
VOLUNTARIOS CON SOGA
Un partido opositor
que tocan y bota chispas
quiere mandar sus avispas
al Ministro de Interior.
No ha encendido su furor
una cuestión de bolsillo
se trata del padroncillo
nueva moda electoral
que dicen rememorar
mucho la Era de Trujillo.
No ve el Ministro aludido
su conflicto de interés
pues pertenece a la vez
al Gobierno y al partido.
Quizás no haya percibido
su marcada dualidad
de darle seguridad
al pueblo y toda su gente
o defender con sus dientes
su política entidad.
Quizá olvida el funcionario
aquel caso conocido
del jefe que hizo un pedido
de reclutar voluntarios.
Sólo un corto comentario
agregó el subordinado:
“Ahí le envío lo ordenado
en seco nadie se ahoga
y devuélvame la soga
con que los mando amarrados”.
Rafael Martínez Céspedes – Santo Domingo, R. D. 18 de enero de 2008
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2 comentarios:
Cada día hay algo nuevo. Wow
Es de los tiempos de Lilís.
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