Me imagino que cualquiera viviría feliz con un espejo mágico igual al que la reina malvada utilizaba para confirmar su belleza en la maravillosa historia de Blancanieves. Por supuesto, que tal espejo aún existe, si nos llevamos de los resultados de ciertas encuestas políticas que siempre colocan por encima al candidato que pague por la realización de los sondeos.
La teoría de tomar muestras pequeñas en una población para determinar mediante su análisis matemático la verdad sobre el universo de donde proviene dicha muestra, pertenece al campo de la Estadística. Desgraciadamente, dijo alguien que existen tres tipos de mentiras: mentiras blancas, mentiras burdas y las estadísticas. Por eso, no debemos culpar a los partidos de utilizar una ciencia que usa un lenguaje similar al de los políticos. Desgraciadamente para ellos también, sólo uno es el que gana. Mientras tanto, imaginémonos un diálogo entre algunos candidatos y
EL ESPEJO EN LA PARED
Espejito, espejito
espejito en la pared
dime que yo ganaré
por mi discurso bonito.
“En Agosto tempranito
como bien tú lo has pensado
los recursos del Estado
al triunfo te llevarán
y la ñoña te impondrán
en presencia del Senado”.
Espejito en la pared
como soy buen pelotero
dime que seré el primero
y que en Mayo triunfaré.
“A ti te aseguraré
que en igual fecha y horario
tus recursos millonarios
al triunfo te llevarán
y la banda te impondrán
en el mismito escenario.”
“La ñoña será a ti dada
candidato de los pobres
pues no será tu quien sobre
en la fecha mencionada.”
No habla el espejo del hada
que siempre amable contesta
y lisonjera respuesta
da a su dueña a cada hora
quien habla es la consultora
a quién pagan las encuestas.
Rafael Martínez Céspedes
Santo Domingo, R. D. 22 de enero de 2008
La teoría de tomar muestras pequeñas en una población para determinar mediante su análisis matemático la verdad sobre el universo de donde proviene dicha muestra, pertenece al campo de la Estadística. Desgraciadamente, dijo alguien que existen tres tipos de mentiras: mentiras blancas, mentiras burdas y las estadísticas. Por eso, no debemos culpar a los partidos de utilizar una ciencia que usa un lenguaje similar al de los políticos. Desgraciadamente para ellos también, sólo uno es el que gana. Mientras tanto, imaginémonos un diálogo entre algunos candidatos y
EL ESPEJO EN LA PARED
Espejito, espejito
espejito en la pared
dime que yo ganaré
por mi discurso bonito.
“En Agosto tempranito
como bien tú lo has pensado
los recursos del Estado
al triunfo te llevarán
y la ñoña te impondrán
en presencia del Senado”.
Espejito en la pared
como soy buen pelotero
dime que seré el primero
y que en Mayo triunfaré.
“A ti te aseguraré
que en igual fecha y horario
tus recursos millonarios
al triunfo te llevarán
y la banda te impondrán
en el mismito escenario.”
“La ñoña será a ti dada
candidato de los pobres
pues no será tu quien sobre
en la fecha mencionada.”
No habla el espejo del hada
que siempre amable contesta
y lisonjera respuesta
da a su dueña a cada hora
quien habla es la consultora
a quién pagan las encuestas.
Rafael Martínez Céspedes
Santo Domingo, R. D. 22 de enero de 2008
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