miércoles, 25 de junio de 2008

INAGOTABLE VERGUENZA

Una muy bien orquestada campaña publicitaria, diseñada para atraer turistas a nuestro país, se ejecuta bajo el slogan: “República Dominicana: Inagotable” Desafortunadamente, el país también está resultando inagotable en su capacidad de generar situaciones escandalosas que involucran a instituciones del Estado y la impunidad con que se trata a los responsables de las mismas.

Caso No. 1. La Cámara de Cuentas, el organismo encargado de auditar las operaciones de todas las instituciones del Estado, como resultado de las declaraciones gratuitas de todos sus jueces miembros, ha provocado un escándalo mayúsculo donde se revela el aumento irregular de sus propios sueldos, la concesión de préstamos para garantizar su retiro y un supuesto chantaje a otras instituciones públicas para recibir dinero a cambio de no publicar ciertas auditorías. “Una situación espeluznante” la definió uno de los diputados investigadores. “Una Cámara de Cuentos” agregó un chusco (de terror por supuesto).

Caso No. 2. Un funcionario de nivel medio de una Secretaría de Estado, reportó el robo en su domicilio de la suma de RD$125 millones de pesos, o sea alrededor de US$3.6 millones de dólares. Menuda Caja Chica para guardar en un aposento.

Caso No. 3. Un alto dirigente político fue sacado de un expediente de corrupción, por supuestos servicios prestados a la campaña electoral recién pasada, mientras que los demás imputados continúan siendo perseguidos. Todas son fuentes de


INAGOTABLE VERGUENZA

Hace tiempo se decía
que ya por generaciones
tres claras aspiraciones
este gran pueblo tenía.
Sacarse la lotería,
la visa del consulado
o un empleo bien pagado
del tren gubernamental
del país más especial
donde nada está vedado.

Es país inagotable
ya que cualquier funcionario
puede esconder en su armario
una suma respetable.
Nadie aparece confiable
y al parecer no es afrenta
una cámara que cuenta
que sus sueldos duplicaron
y millones se prestaron
para vivir de la renta.

La justicia hace excepciones
y saca de un expediente
algún alto dirigente
que haya robado millones.
Vivir sin instituciones
sólo conduce al abismo
o a un horrible cataclismo
y a nuestra eventual desgracia
pues muerta la democracia
nos aguarda el despotismo.

Rafael Martínez Céspedes
25 de junio de 2008

lunes, 16 de junio de 2008

TRUJILLO 31: "NO OLVIDEMOS LAS LECCIONES"

La Era de Trujillo se inició en el 1930 sobre el charco de sangre que dejaron los esposos Martínez Reyna y terminó con otro que dejó el propio tirano, el 30 de mayo de 1961, al caer ajusticiado por un puñado de valientes. La sangre tiñó pues el comienzo, el final y todas las etapas que conformaron la famosa Era.

Casi medio siglo ha transcurrido después de la desaparición del dictador y quienes no conocieron los detalles del espantoso período tienden a formular las mismas preguntas: ¿Cómo permitieron quienes podían detenerlo el surgimiento de tal régimen? ¿Cómo pudo todo un pueblo soportar tres décadas un yugo de tal naturaleza? Si Trujillo fue el responsable de crear el Estado dominicano moderno ¿valió la pena la sangre derramada?

Las dos primeras preguntas las formula también Joaquín Balaguer en una de sus obras: “¿Por qué tanto yo como los hombres del Golpe de Febrero de 1930… nos inclinamos ante la iniquidad y concluimos por congraciarnos con ella? Y las responde así: “Todos nos dejamos arrastrar por la fatalidad del hecho consumado y nos inclinamos satisfechos e indiferentes al paso del hombre que ya se perfilaba como un mandamás de agallas no comunes”. Si la respuesta de Balaguer incluye toda su generación, no hace falta ningún comentario adicional. Y si todo el emporio económico creado por el dictador, fue consumido en pocos años por la corrupción de sus voraces sucesores; si la invasión pacífica de los haitianos no puede detenerse y la pobreza sigue siendo el mayor reto de este pueblo, un rotundo NO debía ser la respuesta a la tercera. Por eso,


NO OLVIDEMOS LAS LECCIONES

Ahora dicen que fue en vano
tanta sangre y tanto llanto
en esa Era de espanto
que nos legara el tirano.
El viejo problema haitiano
si no peor está igual
y el emporio colosal
con que pagó a la nación
lo acabó la corrupción
y la rapiña estatal.


Monopolio de la hombría
nos confesó un cortesano
el pueblo dominicano
al dictador concedía.
En aquella granja había
mil gallinas para un gallo
hasta que un certero rayo
disparado por valientes
fulminó allí de repente
a Trujillo un mes de Mayo.

Estas horribles lecciones
de memoria hay que aprender
si queremos proteger
futuras generaciones.
Sólo las instituciones
sostienen la libertad
combaten la iniquidad
y nos defienden de un necio
que nos exija el precio
de vivir sin dignidad.

Rafael Martínez Céspedes
16 de junio de 2008

sábado, 14 de junio de 2008

TRUJILLO 30: "UN DOLOR HAY QUE SENTIRLO"


“Mi gobierno está más fuerte que nunca” proclamó Trujillo en el 1960, “y tiene sólo dos problemas: la iglesia católica y las hermanas Mirabal”, refiriéndose a las tres valerosas mujeres, parte del Movimiento 14 de junio o “catorcistas”, cuyo único crimen visible era defender su dignidad individual. Por supuesto, Trujillo tenía, aparte de la creciente oposición interna, también otros graves problemas: la definición del comunismo de Fidel Castro que empujó a los americanos a buscar una solución al expediente Trujillo y la obsesión del dictador y su diabólico socio Johnny Abbes de realizar acciones temerarias como atentar contra la vida del presidente Betancourt de Venezuela, lo que trajo el bloqueo y las sanciones económicas de la OEA.

A lo interno, el dúo diabólico emprendió una agresiva campaña contra todo lo que oliera a Iglesia o a “catorcista” . A los primeros los insultaba, asediaba, amenazaba y profanaba sus templos. A los segundos los encarcelaba, los torturaba y, si no cambiaban de opinión, los mataba, como fue el alevoso crimen cometido en Noviembre del 60 contra las indefensas hermanas Mirabal que sacudió la fibra más sensible de la nación.

Docenas de jóvenes – incluyendo funcionarios trujillistas – buscaron protección y amparo en embajadas extranjeras. Quienes quedaron, sin embargo, no podían superar esa sensación de impotencia, inseguridad vital y asco frente a esa espiral sangrienta e interminable, ni existían palabras para explicar tanto horror y desvergüenza. Es que ni el mismo Dante hubiese podido describir con palabras el infierno trujillista. Tienen razón pues los que dicen que es imposible describir un dolor, pues está claro y probado que

UN DOLOR HAY QUE SENTIRLO

La noche es más oscura
justo antes de amanecer
y así mismo fue al caer
Trujillo y su dictadura.
Igual perseguían un cura
que mataban catorcistas
y hasta los más trujillistas
por docenas se asilaban
o asesinar atentaban
algún vecino estadista.


A vivir sin dignidad
y habitar con el demonio
nos forzó ese matrimonio
de la fuerza y la maldad.
Más la gran iniquidad
que aceleró su final
fue aquella muerte brutal
de esas tres fragantes rosas
las altivas mariposas
que fueron las Mirabal.

Describir el gran horror
que se sentía en esa Era
no podría aunque quisiera
Dante el insigne autor.
Trujillo fue un gran dolor
que taladró cuerpo y mente
y lo entiende solamente
quien lo tuvo que sufrir
dolor que ha de definir
sólo quien el mismo siente.

Rafael Martínez Céspedes
14 de junio de 2008



viernes, 13 de junio de 2008

TRUJILLO 29: "CON LOS CURAS NO TE METAS"


Son pocas las parejas que pueden jactarse de lograr una unión feliz de casi treinta años. Más difícil es aún, si el matrimonio es de conveniencia como lo fue el de Trujillo con la Iglesia Católica. Ese apoyo tácito de la más vieja institución humana a la horrible tiranía adquiría casi carácter de complicidad, bajo la muda protesta de un pueblo fervoroso, cuya única esperanza y seguridad la había enviado la dictadura a un distante más allá.

La fallida invasión del 14 de junio fue la chispa que encendió el espíritu de rebelión de la juventud dominicana y un fenómeno nunca visto en el trujillato – el de la oposición clandestina procedente de todas las capas sociales del país– cundió como pólvora encendida. Con la misma celeridad respondió el aparato represivo del tirano y en poco tiempo los verdugos del S.I.M. sobrepasaron su cuota de muertes y de torturas y las cárceles y mazmorras trujillistas se llenaron de opositores. Para sorpresa del propio tirano, la isla era una inmensa prisión, cuyos ocupantes eran los hijos de sus amigos. La iglesia debía tomar ya nuevas medidas.

La llegada discreta de un nuevo Nuncio Papal – Lino Zanini – a finales del 59 fue la primera medida. La Carta Pastoral llamando la atención sobre sus excesos al Jefe y leída en todas las iglesias del país en Enero del 60, fue la segunda. La erupción de aquel terrible volcán irreflexivo no se hizo esperar y los ataques y persecuciones a los miembros de la Iglesia se hicieron cosa común. No quiso al parecer Trujillo oir los sabios consejos de Juan Domingo Perón, que al ver llegar a Zanini – responsable según Perón de su derrocamiento- antes de salir presuroso del país, viendo que el final estaba a la vuelta de la esquina, le gritó a su buen amigo:

¡CON LOS CURAS NO TE METAS!

Con milenios de experiencia
con el Jefe esa mujer
pudo fácil mantener
su boda de conveniencia.
La iglesia ponía sapiencia
y Trujillo los presentes
y ella con aire inocente
hacia otro lado veía
sabiendo esa tiranía
era cruenta e inclemente.

La felicidad no dura
cuando pasan treinta años
y presas del desengaño
al fin gritaron los curas.
Su carta a la dictadura
leyeron con emoción
diciendo la oposición
por Trujillo fue barrida
y la isla convertida
en una inmensa prisión.

Al Zanini ver llegar
Perón del país salió
pero antes aconsejó
a Trujillo al escapar.
Te doy antes de marchar
mi más antigua receta
con los curas no te metas
saben mucho de Poder
y te van a deponer
de la forma más discreta.

Rafael Martínez Céspedes
13 de junio de 2008

jueves, 12 de junio de 2008

TRUJILLO 28: "EL PRINCIPIO DEL FINAL"


Los que teníamos la esperanza de llegar vivos hasta el final de Trujillo, acariciábamos la ilusión que el triunfo de la guerrilla cubana, que peleaba desde el 1956 en la Sierra Maestra, sería el detonante que provocaría la caída estrepitosa de Trujillo. Por eso, la llegada triunfal de Fidel Castro a la Habana en los primeros días de Enero del 59 fue una pequeña luz al final del túnel largo y oscuro en que se había convertido la tiranía trujillista. Cada vez eran más atrevidas y cercanas a la locura las acciones de Trujillo, tanto en el plano nacional como internacional, y más sofisticado el control de la población de Johnny Abbes y su infernal SIM.

Era casi un secreto a voces que desde Cuba vendría una expedición y por eso Trujillo se jactaba públicamente que a su llegada “barbas y sesos volarían como mariposas.”. Tenía razón. El 14 de junio del 59 llegaron tres grupos de combatientes por Maimón, Constanza y Estero Hondo y en días el poderoso aparato militar del tirano aplastó sin clemencia a los invasores. La orden de no tomar prisioneros fue estrictamente acatada, y sólo unos cuantos sobrevivieron después de largas torturas. La muerte de estos soñadores se pensó, había sido en vano.

No lo fue. El acontecimiento precipitó la locura senil del Jefe y su verdugo favorito que recrudecieron el terror. Pero el mero hecho de que alguien se atreviese a desafiar al tirano incentivó la formación de movimientos clandestinos para procurar su eliminación personal. Para los americanos, se puso de manifiesto el hecho de que Trujillo- con Fidel Castro nadando ahora en el turbulento Caribe - se había convertido en una amenaza para sus más altos intereses. Para el antiguo telegrafista de San Cristóbal, había comenzado


EL PRINCIPIO DEL FINAL

Era ya la tiranía
pesadilla interminable
pues el Drácula insaciable
más sangre aún pedía.
Confiábamos que vendría
de fuera la salvación
y que la revolución
nacida en Sierra Maestra
daría a la tierra nuestra
su ansiada liberación.

Por Maimón y por Constanza
llegaron los soñadores
patriotas liberadores
con su carga de esperanza.
Trujillo una gran matanza
fácil pudo realizar
pues ventaja militar
tenía en la elevada sierra
su maquinaria de guerra
instrumento de matar.

Viendo sus sesos volar
como predijo el tirano
se podría pensar que en vano
se vinieron a inmolar.
Ahora se puede apreciar
de ese gesto su hermosura
pues la horrible dictadura
terminó de enloquecer
y empezó el amanecer
de esa noche negra oscura.

Rafael Martínez Céspedes
12 de junio de 2008






martes, 10 de junio de 2008

TRUJILLO 27: "CON EL SIM EN LA CUARENTA"


Quienes lo conocieron a principios de la década del cincuenta, describen a Johnny Abbes García, como un joven alto, desgarbado, que se ganaba la vida entre un empleo mediocre en el Gobierno y sus funciones de cronista deportivo, aunque su verdadera vocación habría de ser el ejercicio de la maldad en todas sus formas.

En México, adonde fue enviado casi fortuitamente, “retó” al Jefe a que lo probara, recibiendo la atención de Trujillo quien notó su indiscutible capacidad para el espionaje, el crimen y la tortura. De un plumazo, en 1957 fue hecho Coronel y Jefe del temido Servicio de Inteligencia Militar (SIM) desde donde aglutinó el terror difuso existente y perfeccionó la GESTAPO tropical que aterrorizaría todo un pueblo durante los últimos años de la fatídica Era. En estrecha colaboración con su Jefe, se le atribuye el atentado contra el Presidente Rómulo Betancourt y el asesinato a palos y golpes de las hermanas Mirabal y el chofer de estas, ambos en el 1960.

En dos ergástulas medievales – la de “El Nueve” y “La Cuarenta”, los sospechosos o inocentes denunciados de ser enemigos de Trujillo, eran ablandados mediante los métodos más primitivos de tortura que incluían sillas y bastones eléctricos para explorar las partes pudendas de los reos. Parte de la modernización del SIM por Abbes, fue la adquisición de una flota de Volkswagen escarabajos o “cepillos”, equipados con transmisores, donde viajaban armados los inclementes matones del SIM. El ruido enervante de los motores de estos “cepillos” que rompía el silencio de las noches trujillistas, era normalmente el preludio de una “desaparición” y consiguiente tortura y muerte de algún infeliz parroquiano. Perdono pues por inocentes a quienes sin saber en épocas de crisis, piden de nuevo a Trujillo. A quienes lo hacen a consciencia, sólo les deseo pasen un día

CON EL SIM POR LA CUARENTA

Un desgarbado cronista
psicópata criminal
hizo aún más infernal
la tiranía trujillista.
En maldad especialista
disfrutaba la tortura
y asociado a la locura
del siniestro dictador
modernizó el gran terror
que existía en la dictadura.

Apoyado por Trujillo
ave del mismo plumaje
tecnificó el espionaje
creado por el caudillo.
El ruido de aquel cepillo
modernamente equipado
era aviso anticipado
que a una tortura brutal
y a la pena capital
sería un hombre condenado

Tocando eléctricamente
a un preso en sus genitales
confesiones a raudales
soltaba el más inocente.
Abbes verdugo inclemente
de aquella Era violenta
parece no tuvo en cuenta
que iría junto al dictador
a un infierno peor
que su famosa Cuarenta.


Rafael Martínez Céspedes
11 de junio de 2008.

viernes, 6 de junio de 2008

TRUJILLO 25: "DEL CRIMEN HIZO UNA CIENCIA"


Las acciones de Trujillo en sus últimos años apuntan a que el dictador estaba rayando en la locura, la cual se acentuó con el viaje a España en el 1954. En Madrid se paseó Trujillo con Franco en limosina descubierta, sin ruborizarse por su pesado uniforme lleno de medallas y su ridículo bicornio emplumado. Al compás de alegres pasodobles y aplaudido por la muchedumbre franquista, esos homenajes y aquel ambiente de pomposidad real, inflaron su ego hasta llenar cada espacio del viejo continente. ¡Europa descubría su genio!

Trujillo quedó “picado” por la tournée europea y su llegada a casa fue marcada por una serie de mítines y manifestaciones por todo el país, e igual que en España sobre Cadillac descapotado, luciendo su eterno bicornio emplumado. En estos desfiles, a los cuales todo el mundo tenía que asistir so pena de ser denunciado, el tirano y su séquito acomodados en una especie de arco triunfal, contemplaban desde lo alto la interminable cabalgata de una humanidad sudorosa portando letreros y pancartas que designaban su procedencia.

Si este ambiente surrealista no probaba la locura de Trujillo, lo hicieron sus acciones posteriores: La ejecución sumaria de los asaltantes de un banco; el escándalo formado cuando en una celebración privada no mencionaron su nombre; la inversión de la mitad del presupuesto nacional para celebrar los 25 años de su gobierno; el secuestro de un profesor extranjero en pleno corazón de Nueva York; los magnicidios perpetrados en países vecinos; su íntima asociación con un psicópata para crear el aparato represivo más sanguinario que registra la historia del Caribe y la muerte de tres hermosas e inteligentes jóvenes que no se doblegaron a sus caprichos, son claras pruebas de su demencia criminal. Trujillo sencillamente

DEL CRIMEN HIZO UNA CIENCIA

En Madrid y el Vaticano
dieron bienvenida real
al dictador tropical
que se creía soberano.
El ego del gran tirano
se infló descomunalmente
pero él creyó de repente
dentro de su egolatría
que su genio descubría
ahora el Viejo Continente.

Alimentó al regresar
su ego voluminoso
y aquel pueblo sudoroso
lo acostumbró a desfilar.
Ridículo era observar
aquel hombre trastornado
regiamente uniformado
con mil medallas brillantes
y en su cabeza arrogante
puesto el bicornio emplumado.

Confirmando su locura
contrató un verdugo nato
y creó un gran aparato
de opresión y de tortura.
La siniestra dictadura
de Trujillo en su demencia
cuando dictaba sentencia
traía muerte y dolor
pues aquel cruel dictador
de nadie tuvo clemencia.

Rafael Martínez Céspedes

6 de junio de 2008

miércoles, 4 de junio de 2008

TRUJILLO 24: "FULMINADO POR UN RAYO"


Abogado, intelectual brillante y poeta. Maestro del verbo y la oratoria. Frío, enigmático, calculador, astuto, con una paciencia dispuesta a esperar el momento propicio, son adjetivos que sólo pueden describir a un importante personaje de la Era de Trujillo: Joaquín Balaguer.

Redactor del Manifiesto del Golpe de Febrero del 1930 y asociado en la conspiración con el Lic. Estrella Ureña, al caer este en desgracia, Balaguer optó por una posición de “bajo perfil” desempeñando puestos anodinos en la diplomacia de Trujillo, pero subiendo el escalafón hasta desempeñarse como Embajador en Colombia, Honduras y México, donde obviamente le rindió servicios especiales. Su lealtad y devoción a Trujillo y su probado talento le ayudaron a ganar la confianza del Jefe, quien lo elevó a Secretario de Educación, Canciller, Vicepresidente de su hermano Héctor y “Presidente” hasta la muerte del tirano en 1961.

Balaguer fue el Canciller que acompañó a Trujillo a un largo viaje a Europa para firmar en Roma el Concordato de 1954, del cual Balaguer fue el único héroe. Dice este que lo impactó el encuentro del sátrapa con Pío XII: “Durante la audiencia de 15 minutos, permaneció de rodillas ante el Papa. El hombre que lució tantas medallas sobre su pecho arrogante, postrado ante el Vicario de Cristo, golpeado en la cabeza por un rayo caído de lo alto, comprendería la diferencia entre esa grandeza invisible y la suya con sus falsos orgullos, sus pompas efímeras y sus vanos despliegues de solemnidad.” . Si Dios hubiese enviado un rayo a un sátrapa de la categoría de Trujillo, agregamos personalmente, no hubiese gastado esa divina energía sólo para iluminarlo, más bien hubiese caído.

FULMINADO POR UN RAYO

Balaguer como salido
de novela de misterio
quien no lo tomaba en serio
resultaba sorprendido.
En frondoso árbol subido
buscar frutas no es prudente
aconsejaba inocente
mejor que gotee la fruta
porque siempre quien disfruta
es abajo el más paciente.

Pero su logro mayor
fue tan cerca trabajar
sin la furia provocar
de aquel fiero dictador.
Lo elevó de Embajador
a flamante Canciller
le dio algo de Poder
sin que saliese quemado
y hasta por Él fue llamado
Presidente Balaguer.

Con nadie quedaba mal
por sus sabios pareceres
pues la Silla de Alfileres
era su meta final.
En Roma aquel criminal
no podía Dios perdonarlo
ni tampoco iluminarlo
como Balaguer pensara
y si el Cielo un rayo enviara
sería para fulminarlo.

Rafael Martínez Céspedes
4 de junio de 2008

martes, 3 de junio de 2008

TRUJILLO 23: " FRANKENSTEIN DEL MAR CARIBE"

Al concluir su cuarto mandato, Trujillo delegó en su hermano Héctor la Presidencia para el período 1952-1957, y se dedicó a extender su campo de acción por todo el Caribe. Dentro de su mimetismo permanente con los americanos, fue una forma inteligente de ubicarse en el contexto de la recién iniciada Guerra Fría, el peligroso e irresponsable conflicto indirecto entre los EUA y el emergente imperio soviético que amenazó más de una vez al mundo con un holocausto nuclear.

El Departamento de Estado de los EUA dirigido del 1952 al 1959 por John Foster Dulles, enfrentó radicalmente el comunismo en todo el mundo, como fue el caso de Indochina e Irán. En su área cercana de influencia, los americanos apoyaron todos los gobiernos dictatoriales (Rojas Pinilla en Colombia, Pérez Jiménez en Venezuela, Batista en Cuba, Somoza en Nicaragua, etc ) y derrocaron gobiernos de izquierda como el de Jacobo Arbenz en Guatemala en 1954. Fue cooperando en esta última tarea, donde Trujillo se convirtió en una pieza clave del ajedrez político norteamericano para la Región.

Envalentonado por el éxito, su mente megalómana lo hizo creerse una especie de César caribeño y procedió con inmunidad diplomática a intentar todo tipo de atropellos y magnicidios: el asesinato del Presidente Castillo Armas en Guatemala o el atentado contra Rómulo Betancourt en Venezuela son apenas dos casos que lo convirtieron en una amenaza real para el Caribe. Los americanos, como el científico loco de la novela de Shelley, habían creado un demonio que estaba regresando para perseguirlos. Había que buscar la forma de provocar su destrucción, pues Trujillo se convirtió en el


FRANKENSTEIN DEL MAR CARIBE

La llamada Guerra Fría
dos potencias enfrentó
donde cada cual trató
de imponer su hegemonía.
La lucha al mundo ponía
en un peligro mortal
pues su atómico arsenal
si un botón uno apretaba
al planeta lo llevaba
al holocausto final.

Decían del capitalismo
que el hombre al hombre explotaba
aunque lo mismo pasaba
con el triste comunismo.
Fracasa un imperialismo
que actuando con mezquindad
le niega a la humanidad
en la paz coexistir
ni le permite vivir
sin hambre y con libertad

Un gorila fue encargado
de unas partidas cobrar
y a fuerza pudo lograr
el trabajo encomendado.
Al simio envalentonado
domarlo no fue sencillo
pues actuó como Trujillo
que era un monstruo a quien temer
pues nadie pudo extraer
la plata de su bolsillo.
Rafael Martínez Céspedes
2 de junio de 2008

TRUJILLO 23: "UN FRANKENSTEIN CARIBEÑO"

Al concluir su cuarto mandato, Trujillo delegó en su hermano Héctor la Presidencia para el período 1952-1957, y se dedicó a extender su campo de acción por todo el Caribe. Dentro de su mimetismo permanente con los americanos, fue una forma inteligente de ubicarse en el contexto de la recién iniciada Guerra Fría, el peligroso e irresponsable conflicto indirecto entre los EUA y el emergente imperio soviético que amenazó más de una vez al mundo con un holocausto nuclear.

El Departamento de Estado dirigido (1952 a 1959) por John Foster Dulles, enfrentó radicalmente el comunismo en todo el mundo, como fue el caso de Indochina e Irán. En su área cercana de influencia, los americanos apoyaron todos los gobiernos dictatoriales (Rojas Pinilla en Colombia, Pérez Jiménez en Venezuela, Batista en Cuba, Somoza en Nicaragua, etc ) y derrocaron gobiernos de izquierda como el de Jacobo Arbenz en Guatemala en 1954. Fue cooperando en esta última tarea, donde Trujillo se convirtió en una pieza clave del ajedrez político norteamericano para la Región.

Envalentonado por el éxito, su mente megalómana lo hizo creerse una especie de César caribeño y procedió con inmunidad diplomática a intentar todo tipo de atropellos y magnicidios: el asesinato del Presidente Castillo Armas en Guatemala o el atentado contra Rómulo Betancourt en Venezuela son apenas dos casos que lo convirtieron en una amenaza real para el Caribe. Los americanos, como el científico loco de la novela de Shelley, habían creado un demonio que estaba regresando para perseguirlos. Había que buscar la forma de provocar su destrucción, pues Trujillo se convirtió en

UN FRANKENSTEIN CARIBEÑO

La llamada Guerra Fría
dos potencias enfrentó
donde cada cual trató
de imponer su hegemonía.
La lucha al mundo ponía
en un peligro mortal
pues su atómico arsenal
si un botón uno apretaba
al planeta lo llevaba
al holocausto final.

Decían del capitalismo
que el hombre al hombre explotaba
aunque lo mismo pasaba
con el triste comunismo.
Fracasa un imperialismo
que mostrando mezquindad
le niega a la humanidad
en la paz coexistir
ni le permite vivir
sin hambre y con libertad

Un gorila fue encargado
de unas partidas cobrar
y a fuerza pudo lograr
el trabajo encomendado.
Al simio envalentonado
domarlo no fue sencillo
caso igual al de Trujillo
gran demonio a quien temer
y nadie pudo extraer
la plata de su bolsillo.



Rafael Martínez Céspedes

2 de junio de 2008