JUGUETITOS NUCLEARES

Según la definición del Diccionario de la Lengua Española, “eufemismo” es “una manifestación suave o decorosa de ideas cuya recta y franca expresión sería dura o malsonante”. Sólo un eufemismo puede explicar entonces el término “Guerra Fría” utilizado para describir “el enfrentamiento ideológico que tuvo lugar desde finales de la Segunda Guerra Mundial (1945) entre los bloques occidental-capitalista liderado por los Estados Unidos y oriental-comunista liderado por la Unión Soviética.”  http://es.wikipedia.org/wiki/Guerra_Fr%C3%ADa

Como se sabe, finalizado el conflicto citado, las naciones de Occidente y los soviéticos se dividieron el mundo según un mapa dibujado por Churchill en una servilleta. Una de las posesiones repartidas fue la Península de Corea: la del Norte comunista y la del Sur capitalista. Una invasión de la primera  a esta última en el 1950, provocó el primer enfrentamiento serio entre los dos bloques, guerra muy caliente que duró 3 años, que causó millones de bajas y que culminó con un armisticio inestable y en un país dividido hasta el día de hoy. Por favor véase el enlace más abajo, el cual junto a las demás referencias dadas, ofrece una interesante lección de Historia Contemporánea y una mejor visión de lo que mueve y motiva a esta especie beligerante y depredadora de  la que usted y yo formamos parte:  
http://es.wikipedia.org/wiki/Guerra_de_Corea

El otro cruento ejemplo del eufemismo citado  es el caso de Vietnam,  el cual,  más que una expresión dura o malsonante, fue una guerra sangrienta y horrorosa.  Pregunten si no, a cualquier norteamericano – ahora que se han cumplido 40 años de la deshonrosa salida de las tropas norteamericanas de Saigón – si fue fría aquella singular guerra que desangró y dividió esa sociedad y dejó la friolera de casi 6 millones de personas muertas en el conflicto. Más sobre Vietnam en el enlace:  http://es.wikipedia.org/wiki/Guerra_de_Vietnam

Viene este largo introito a colación, para que, si no está enterado,  el lector pueda entender la alharaca que se ha formado con las amenazas que está haciendo el joven dictador de la comunista Corea del Norte – equipado por supuesto con las temidas armas nucleares – de llevar a cabo una destrucción miserable tanto de sus hermanos del Sur, como de todas las bases y pertenencias norteamericanas vecinas, incluyendo un ataque hasta el propio Continente Americano.  Ahora de repente todo el planeta llama al pichón de dictador, loco, inmaduro y desfasado, riéndose de sus peligrosas amenazas. Con razón creo, que podrían devolverse los mismos epítetos a todas las naciones y empresas responsables de haberle suministrado estos pertrechos  que, en el juego del mercado, para ellos sólo eran

JUGUETITOS NUCLEARES

Rusia y los americanos

o  Marx contra el Capital

en una lucha campal

han metido a los humanos

Vietnamitas, coreanos

metieron en tal sangría

donde muertos cada día

ponía muy diversa gente

en guerra que aunque caliente

han querido llamar fría.

Caído el Muro de Berlín

reina ya el capitalismo

no es ateo el comunismo

pues la plata es común fin

aunque en remoto confín

siempre surge un desfasado

que viviendo en el pasado

llama al yanqui imperialista

cuando China Comunista

ahora es dueña del mercado.

Tal es el caso reciente

de este joven dictador

que risa y también temor

está inspirando a la gente.

Sólo este mundo demente

se puede el gran lujo dar

de dejar alguien jugar

con juguetes nucleares

que pueden desde esos mares

con todo el mundo acabar.

Rafael Martínez Céspedes

3 de abril de 2013