Aguijoneados por el
extenso daño que la competencia voraz y sin control entre naciones ejerce sobre
nuestro medio ambiente, los científicos de las Naciones Unidas pusieron en boga
el término “desarrollo sostenible o
sustentable”, que según la definición formal se trata de “satisfacer las necesidades de las generaciones presentes sin
comprometer las posibilidades de las del futuro para atender sus propias
necesidades.” Hasta aquí la teoría.
Cada cierto número
de años se reúnen en algún lugar de nuestro maltratado planeta, científicos y
estadistas de todo el mundo para analizar el progreso y establecer directivas
sobre el tema. La última celebrada en Rio de Janeiro en Junio del 2012 y
bautizada R+20 ya que la primera cumbre de la tierra fue celebrada en Río en
1992. De estas cumbres, diseñadas para crear conciencia sobre el daño que las
economías poderosas y desenfrenadas de mercado están causando sobre el medio
ambiente, salió a propósito la perla del Presidente Bush padre, de que el “estilo
de vida norteamericana no era negociable.”
Es que es difícil,
para proteger el planeta y sus agotados recursos, poner límites o crear
estancamiento en economías que se sustentan sobre el aumento del consumo. La
crisis presente que después de golpear a los Estados Unidos, lo hace hoy con
toda Europa muestra la gran encrucijada a que se enfrentan los países “desarrollados”
si no aplican las formulas rápidas keynesianas del estímulo al consumo, frente a
las medidas tipo “alemán” de largo plazo de apretarse el cinturón y organizar
con austeridad la casa.
Por eso sonaron
refrescantes las palabras de Pepe Mujica – antiguo guerrillero Tupamaro y desde
el 2010 Presidente de Uruguay – describiendo de forma romántica, como el mundo –
buscando ganar más plata para adquirir más cachivaches – trabaja hoy sin
descanso, y en despiadada competencia ha olvidado la fraternidad y el calor que
representa compartir con los amigos o sentir la tibieza de un abrazo sincero. Ahí
les dejo pues, el discurso de Mujica y a su ilusión yo le llamo:
HOY LLORA PEPE
MUJICA
Mujica con humildad
viejo, sabio, guerrillero
le preocupa el derrotero
que hoy sigue la humanidad
Dijo la felicidad
antiguo bien estimable
lo reemplazó el insaciable
harto voraz consumismo
que este planeta al abismo
lanza y hace inhabitable.
Lo dijo en Río al hablar
en un lenguaje cortante
y que a más de un gobernante
debió mucho molestar
pues lo que importa es salvar
un modelo ya gastado
donde gobierna el mercado
y es Reina la Economía
aunque muera cada día
un planeta devastado.
.
Que es triste la condición
de esta pobre humanidad
que ahora juzga la amistad
como una vana ilusión
olvidando en confusión
de un abrazo la tibieza
sin saber que la pobreza
no estriba en poco tener
ser pobre es no contener
un día el afán de riqueza.
Rafael Martínez Céspedes
2 de julio de 2012
Rafael Martínez Céspedes
2 de julio de 2012
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