Está sucediendo a ambos
lados del Atlántico. En Roma, asiento del Pontificado Romano hay dos sedes
vacantes. La primera, muy comentada por los medios – la elección de un nuevo Papa
para reemplazar a Benedicto XVI quien abdicara a su elevado cargo, según dicen,
después de haber recibido un informe secreto donde se revelan escándalos
relacionados con bancos del Vaticano y otros de tipo sexual que involucran
altos dignatarios de la Iglesia. Muchos cardenales, se comenta,están condicionando
su voto a que se le entregue dicho informe que según el Papa renunciante sólo
debe conocer el nuevo Pontífice.
La otra sede vacante en
Italia es el resultado de unas recientes elecciones donde el Poder político ha
quedado fraccionado, por los resultados de la participación de un comediante
italiano Beppe Grillo quien denunciando la corrupción de los partidos políticos tradicionales casi se
alza conn el triunfo, pero ha dividido el gobierno de tal forma, que no existe la
mayoría que se requiere para gobernar armónicamente la ya maltrecha tercera
economía de la Eurozona. Ya los mercados hablaron al desplomarse cuando se
conocieron los resultados y la frase del presidente saliente Giorgio Napolitano
quien declaró unas horas antes de conocerse los resultados, que “se sentía como
estar en Hiroshima un poco antes de la explosión de la famosa bomba", no dan espacio de aliento.
La bomba real cayó en
Venezuela, al anunciarse oficialmente la muerte del legendario Hugo Chávez, el
militar de izquierda que con su revolución bolivariana y alianza con Fidel
Castro y harto de la corrupción de los partidos políticos tradicionales de ese
país petrolero, conmocionó en una década
toda la América Latina, la región de
influencia tradicional de la primera potencia mundial, los Estados Unidos. La multitudinaria ceremonia del sepelio y el
sentir genuino de todo esa masa pobre, debía alertar a estos últimos de revisar
un poco su política hacia lo que sido siempre “su patio trasero”. Como nota
curiosa, debemos aquí agregar que mientras en los discursos de los seguidores
de Chávez se exaltaba a Jesús Cristo, en el cónclave romano discuten sexo y
dinero.
En los tres casos, los
analistas comienza a advertir sobre los peligros de un “Vacío de Poder” término
elegante para designar la anarquía y creado en una sociedad cuando personalidades
carismáticas o avasallantes desaparecen físicamente pues, al igual que en la
Naturaleza cuando existe un vacío, se crean las condiciones para que fuerzas
exteriores se precipiten con celeridad a llenarlo. Chávez, Juan Pablo II y
Berlusconi pudiesen ser tres huracanes que estén gravitando sobre los tres
casos que hemos enumerado. Veamos pues
con atención que pasará pues
YA SON TRES SEDES
VACANTES
En Roma Sede Vacante
ya llegan los
cardenales
en Caracas funerales
de Chavez el Comandante
aunque resulta chocante
que en el país petrolero
se hable de Cristo
primero
mientras que en el
Vaticano
en el cónclave romano
se hable de sexo y
dinero.
En Roma hay que
recordar
hay otra sede vacante
pues se alzaba un
comediante
con la vara de mandar
que hará duro el gobernar
pues no existe mayoría
y hay temor la economía
se termine de perder
pues un vacío de Poder
equivale a la anarquía.
Sin caer en pesimismo
o en la falta de equidad
se ve gran fragilidad
en Italia y en el
chavismo
pues se ha creado un
abismo
muy difícil de llenar
pues no es fácil
reemplazar
a un Chávez que cambió el mundo
al gran Juan Pablo Segundo
o a Berlusconi
olvidar.
Rafael Martínez Céspedes
10 de marzo de 2013
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