domingo, 3 de agosto de 2008

EL SUEÑO DE LUTHER KING

Dos acontecimientos interesantes y dignos de comentarse han ocurrido recientemente en Alemania. El primero, fue el nacimiento de gemelos a una pareja – el padre un alemán blanco y la madre una negra de Kenya. Lo curioso es que el niño nació blanco como el padre y la niña negra como la madre. El otro hecho, fue la multitudinaria manifestación que tuvo lugar en Berlín- antigua sede del racista Tercer Reich de Hitler – donde el orador principal fue el afro americano Barrack Obama, virtual candidato a la Presidencia de los Estados Unidos. Gran poder de convocatoria o el mundo está realmente cambiando.

Debemos observar que los europeos siempre han sido gente de vanguardia. Se recordará que durante la época de la colonización de América, el gusto adquirido por los europeos por el azúcar de caña, para endulzar el café y el chocolate aumentó de forma extraordinaria en el siglo XV la demanda del néctar, originando el infame comercio triangular: Con el dinero de su venta se compraban esclavos en África que luego eran cambiados por más azúcar en el Caribe. Los esclavos, debían trabajar en condiciones infrahumanas en las plantaciones de caña para producir otra vez más azúcar. Alguien señaló que la adicción al dulce de parte de los europeos mataba no al consumidor si no al productor ya que moría un esclavo negro por cada dos toneladas de azúcar producida.

Extendido el comercio a los Estados Unidos y otros cultivos como el algodón, aumentó de tal forma la importación de africanos, que ya un poco antes de la Guerra Civil de los EUA la población de esclavos rondaba los cinco millones. Larga y sangrienta fue la lucha para lograr su emancipación uno de cuyos puntos luminosos lo fue el famoso discurso “ Tengo un Sueño” de Martín Luther King en 1963 aspirando a que negros y blancos coexistieran sin las leyes discriminatorias que existían contra los primeros. De alguna manera sentimos que se hace realidad

EL SUEÑO DE LUTHER KING

Desde tiempos de Colón
siguiendo con el nazismo
ha sido excusa el racismo
de una vil explotación.
Gratis salía el algodón
en el Sur americano
y azúcar por africanos
se solía intercambiar
en comercio triangular
con tristes seres humanos.

¿Soñó Martin Luter King
segregado en Alabama
que un negro llamado Obama
aplaudirían en Berlín?
¿Soñaría un Hitler ruin
un racista impenitente
que en su Alemania imponente
el Gobierno no prohibiera
que un negrito compartiera
con un blanco el mismo vientre?

El mundo desde su infancia
siempre ha sido injusto y cruel
y al color de cada piel
da una excesiva importancia.
Quedarían en la distancia
los raciales resquemores
y con menos sinsabores
viviríamos largo rato
cuando este mundo insensato
se haga ciego a los colores.

Rafael Martínez Céspedes
3 de agosto de 2008

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Honor a Martin Luther King.

Anónimo dijo...

coño...
desde que surgió la escritura le perdí respeto a la humanidad. y desde ese mismo entonces no había oído a nadie hablando bien de nuestra raza.
es muy alentador recibir correos como estos para pensar que nuestra raza tiene lo necesario para seguir siendo HUMANA...

sed