domingo, 25 de diciembre de 2016

2016: BIENVENIDOS AL DESCONCIERTO


En el diario español El País, el señor Francisco Basterra ha publicado – refiriéndose a los acontecimientos del 2016 un artículo titulado “Bienvenidos a la época del Desconcierto” en el cual habla de las masivas migraciones hacia Europa, el “sorprendente” resultado del Brexit, los esfuerzos de Putín de dividir a Europa, la embestida terrorista de los fanáticos del Estado Islámico contra los principales países de Europa, el movimiento imparable de la derecha hacia el control del poder en todo el mundo y sobre todo según sus palabras “la elección que nunca vimos llegar” y que parece va a lanzar a la todavía más poderosa nación del planeta a una trasnochada política proteccionista y a colocar al mundo a sufrir los sobresaltos de una guerra fría o de un holocausto nuclear.

La palabra desconcierto según la RAE tiene varias acepciones, puede ser: 1) un Estado de ánimo de desorientación y perplejidad; 2) desorden, desavenencia, descomposición; 3) falta de modo y medida en las acciones o palabras y 4) Falta de gobierno y economía. Sorprendentemente el desconcierto que nos deja el 2016 puede describirse por todas y cada una de las indicadas acepciones.

La pregunta a formular, de nuevo es ¿Qué Hacer? ¿A dónde vamos de aquí? Y en el proceso de buscar respuestas, la Humanidad o más bien quienes controlan la máquina de soluciones tienden siempre por amor o por fuerza a brindar las superficiales, las simplistas: “construir un muro”, “expulsar los inmigrantes” , “acabar con la globalización” y otras medidas que son en esencia ingenuas u ocultan engañifas pues es matar el mensajero no a quien envía el mensaje; matar los mosquitos al vuelo, no eliminar las larvas.

En el 2012, Radio Televisión Española puso al aire un extraordinario documental donde un observador acucioso encontrará una gran parte de  las causas subyacentes al terrorismo radical musulmán, a los resultados del Brexit, al movimiento de los indignados y al fenómeno Trump.

Favor verlo en el enlace:


El cual debe ser de estudio obligatorio de todos los que se interesen por el bienestar de la humanidad y la búsqueda de posibles soluciones – si es que existen- pues brillantes intelectuales hablando sobre el tema advierten en el mismo documental “que la solución vendrá solo después de una gran catástrofe”.

Rafael Martínez Céspedes
25 de diciembre de 2016

viernes, 9 de diciembre de 2016

¡ABRÓCHENSE LOS CINTURONES!


El juicio que según nos dicen, expresara el crítico e historiador romano Asinio Polión sobre el celebérrimo Cicerón, pudiese hoy día ser aplicado también a la Humanidad entera: “Ojalá hubiera sido capaz de soportar la prosperidad con mayor auto control y la adversidad con mayor energía!”

Por supuesto ya sabemos que, a juzgar por la historia económica de la Humanidad desde el inicio de la Revolución Industrial hasta nuestros días, esta ha demostrado una gran falta de templanza en el manejo de la gran riqueza generada globalmente, pues lo ha hecho a costa del deterioro de la salud del planeta causada a su vez por un crecimiento poblacional incontrolable y la generación de una inequidad social nunca antes vista. Hemos fallado en la primera fase del juicio a Cicerón ¿pasaremos ahora la prueba de afrontar con energía, la adversidad que se otea en el horizonte?

Muy poco oímos hablar hoy en día de Kenneth Boulding, un economista inglés, profesor emérito en los EUA, quien a mediados del siglo pasado publicó una obra titulada “La Nave Espacial Tierra” donde afirmaba que durante milenios  cuando el número de habitantes era escaso en número y limitado en tecnología, el planeta podía considerarse como “una fuente infinita de recursos y un pozo negro infinito donde vaciar sus desechos”, mientras que hoy en día “el planeta se ha vuelto una nave espacial en la dura realidad del sistema social, biológico y físico donde el hombre está inmerso”. Antes podíamos destruir ambientes y mudarnos a otros más limpios; hoy ya no quedan espacios disponibles para abandonar. Somos, quiérase o no, todos pasajeros de una nave espacial que viaja aceleradamente en el espacio.

El problema, sin embargo, es que la nave tiene varios pilotos, muchos de ellos, tememos, sin la debida preparación, temperamento o experiencia para sortear los inmensos retos que este peligroso vuelo conlleva.

De Cicerón, sabemos,  es la frase, que “los pueblos que olvidan su historia están condenados a repetirla”  y al parecer la Humanidad – que es el pueblo olvidadizo a que aludimos – no parece ver  las señales históricas que aparecen por doquier – como lo hicieron antes de sus  grandes y cruentas catástrofes – anunciando que grandes turbulencias le esperan a nuestra maltrecha nave en un futuro no muy lejano. 

Asustados dentro de la misma, sólo nos queda repetir la frase con que empezamos; ¡Abróchense los cinturones!

Rafael Martínez Céspedes
9 de diciembre de 2016