martes, 23 de diciembre de 2008

DE GUATEMALA A GUATEPEOR


“Puedo resistir todo, menos las tentaciones” es una de las tantas frases célebres del genial escritor irlandés Oscar Wilde, cuya exuberante y nada convencional existencia escandalizó la sociedad victoriana que gobernaba su época. Similar y paradójico dilema creemos viven los miembros de nuestros organismos colegiados – financiados naturalmente por el erario – quienes parece no pueden resistir con entereza las grandes tentaciones que siempre han sido el uso y abuso del Poder vía el auto otorgamiento de forma unánime de prebendas, actuando como si la distribución democrática del pecado hiciera más llevadera la culpa.

Con motivo del recién promulgado fallo de nuestra Suprema Corte de Justicia sobre el caso del contrato de la Sun Land donde los opositores buscaban, al parecer con razón, condenar al gobierno de violar la constitución, han aflorado rumores de supuestas luchas internas entre los miembros del alto tribunal y de compromisos con el Palacio Nacional que bloquean definitivamente la objetividad de sus jueces. Difícil es manejar un corral con más de un gallo y con el dueño de la granja azuzando la pelea.

El otro tema escandaloso es el de la recién designada Cámara de Cuentas, organismo especializado en auditar las cuentas del Gobierno, que sustituyó hace menos de tres meses a una anterior reemplazada por alegados actos de corrupción al otorgarse salarios y bonificaciones no compatibles con una sociedad pobre en tiempos de crisis. Ahora la nueva, como si al no querer sopa nos estuvieran dando caldo, se destapa con salarios y regalías de tal magnitud que nos hace concluir que seguimos pasando

DE GUATEMALA A GUATEPEOR

El corral de la Suprema
dicen tiene varios gallos
fallo por lo cual sus fallos
son escandaloso tema
pues su prestigio y el lema
de justicia independiente
se pierden rápidamente
pues cuando toca fallar
nadie se atreve a tocar
ni al Palacio ni a su gente.

Y una nueva y gran tormenta
por dinero está formada
en la recién designada
Súper Cámara de Cuentas
que como la anterior cuenta
tan sólo su economía
pues sueldos y regalías
se asignan de mil amores
demostrando ser peores
que los de hace algunos días.

Quien no quiera ser tentado
ni aspire a prevaricar
de plano ha de rechazar
un carguito en el Estado
pues aquí ya se ha olvidado
a Duarte y su Patria inmensa
y exigimos recompensa
por muy poco haber servido
y aquel sueño convertido
en país que da vergüenza.

Rafael Martínez Céspedes
22 de diciembre de 2008

1 comentario:

Anónimo dijo...

ALI BABA TIENE SU CUEVA EN EL CARIBE. TREMENDO.